El apresamiento, cancelación y posterior sometimiento a la justicia
de un alto funcionario de la Dirección de Prisiones, cuando introducía
cocaína y bebidas alcohólicas a la cárcel Najayo Hombres, el miércoles
de la semana pasada, ha puesto en evidencia la “práctica social”
llevada allí por ex banqueros condenados a diversas penas.
Fuentes de 7dias.com.do pusieron en evidencia las numerosas fiestas
navideñas celebradas desde diciembre pasado en Najayo Hombres, fiestas
que incluyeron el transporte de modelos femeninas desde Miami a esta
capital y desde la capital a la cárcel.
De acuerdo a esas fuentes, las autoridades carcelarias y policiales
fueron puestas en alerta para ubicar a los promotores de tales fiestas
y, sobretodo, el modo seguido para introducir los componentes de esas
fiestas: bebidas alcohólicas, drogas, refrescos, caviar, camarones,
neveras con hielo y mujeres jóvenes y hermosas durante varias noches a
la semana del mes de diciembre.
José Radhamés de León Ramírez, el funcionario de la Dirección de
Prisiones, fue detenido introduciendo ron, whisky y 39 gramos de
cocaína. El cargamento iba destinado a las celdas de los ex banqueros
Leonel Almonte Vásquez, a quien en Najayo identifican como “Ovejo”, y a
Pedro Castillo.
Ambos venían realizando fiestas desde diciembre pasado, incluso con modelos importadas, aseguró la fuente de 7dias.com.do.
La misma fuente indicó que hace 10 días fue pensionado un coronel
que comandaba la dotación policial en Najayo Hombres, todo consecuencia
de la investigación que se venía realizando.
El nuevo comandante “cerró la puerta que todos veían abierta”, dijo
la fuente refiriéndose a las facilidades recibidas por convictos de
cuello blanco condenados por delitos relacionados con la quiebra
fraudulenta de instituciones bancarias.
Las autoridades judiciales, sin embargo, guardan silencio sobre el
destino del cargamento, a pesar de conocer dónde iba y tener todos los
informes sobre las fiestas en Najayo Hombres.
Las fiestas de los ex banqueros se caracterizan por el disfrute de
buena música, bebederas de alcohol, el uso de drogas entre los
asistentes y la presencia de bellas mujeres.
El ruido mayor se hizo en diciembre cuando dos modelos llegaron
desde Miami a una fiesta auspiciada por Almonte y Castillo, dijo la
fuente.
Sin embargo, el ruido costó el cargo al alto oficial policial, por
lo que los dos ex banqueros acudieron al alto funcionario de Prisiones
para continuar “como antes”, pero el funcionario no esperaba la
reacción del nuevo comandante. Sin embargo, la Dirección de Prisiones
dijo, en nota de prensa, que venía dando seguimiento al funcionario y
su “colaboración” con los presos.
La fuente asegura que eso no es así, sino que la orden llegó desde
la capital por otra vía que tampoco aclaró. El director de Prisiones es
el mayor general Manuel de Jesús Pérez Sánchez, quien también llegó a
ser jefe de la Policía.
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