Los peledeístas y la convención del PLD

El sector que encabeza Miguel Vargas dentro del PRD se ha negado a reconocer los resultados de la pasada convención nacional bajo el argumento de que en las votaciones del 6 de marzo, participaron miembros del PLD y de otros partidos que supuestamente habrían decidido la victoria a favor de Hipólito Mejía.

Pero la única razón expuesta  para fundamentar esta posición es la sospecha o la afirmación sin contenido, ya que los hechos y las evidencias públicas dicen todo lo contrario. Como dato de entrada hay que destacar que a pesar de todas las advertencias hechas por el grupo  de Vargas sobre la eventual  presencia de peledeístas, en las votaciones solo se registraron mil 872 votos observados por las dos partes entre más de un millón de electores. ¿Qué pasó ahí?

El ingeniero Vargas fue él único de los precandidatos que gestionó abiertamente el apoyo  de sectores vinculados al PLD. Primero cuando se reunió con  José Francisco  Peña Guaba (José Frank) presidente del Bloque Institucional Social Demócrata (BI),  un consistente aliado de Leonel Fernández en los últimos   seis procesos electorales. Y luego cuando   logró  que la familia del actual alcalde de Santiago, Gilberto Serulle, de estirpe netamente peledeísta, le endosara su apoyo para la convención del PRD.
En el caso  de Peña Guaba, quien también ha  declarado su respaldo al presidente Fernández en el proceso interno del PLD,  el periodista Delis Herasme, uno de los vicepresidentes del BIS,  confirmó públicamente que el acuerdo se suscribió el pasado 2 de febrero en la casa de José Francisco Peña Gómez en Cambita.

Hay que asumir que tanto en el caso del BIS como de la familia Serulle, sus seguidores participaron en la convención para respaldar a Vargas Maldonado. Ha trascendido que en Santiago la comisión investigadora designada recientemente por la  Comisión Política del PRD detectó una significativa cantidad de votantes inscritos en el PLD. Adivinen por quien votaron esos peledeístas y por qué no fueron objetados ni observados por los delegados de Vargas.
 
El propio sector de Vargas Maldonado reveló  que durante la denominada Jornada “Cara a Cara para Ganar con Miguel”, realizada los días 7, 8 y 9  de enero,  inscribió a más de medio millón de nuevos electores. No lo dijeron pero probablemente muchos de esos electores procedían de las filas del PLD y permanecían en su padrón, por la ya familiar práctica de que en el país la gente  se inscribe en un partido sin desafiliarse de otro.

Los eficientes gestores de nuevos votantes para Miguel probablemente entendían que quitarle  votos al PLD para sumarlos al PRD era una buena iniciativa política. Pero  a  juzgar por las opiniones de ahora, estaban equivocados. Como se equivocaron los Serulle de Santiago cuando se ocuparon de asegurar que los peledeístas (porque estaban en el padrón del PLD), participaran en la convención perredeísta a favor de Vargas.

Pero no olvidemos un detalle: en la última encuesta de febrero del Centro Económico  del Cibao se estableció  que el  45 por ciento de los peledeístas preferían a Vargas y solo el 41 a Hipólito  Mejía.
Mi recomendación sincera es que Miguel Vargas y su formidable  equipo de dirigentes se aboquen con humildad a participar en un diálogo razonable  como lo ha propuesto Hipólito Mejía. Eso sería mucho más productivo que insistir en buscar la quinta pata al gato.